miércoles, 28 de septiembre de 2016

Cómo descubrir nuestras capacidades

Comenzaremos mencionando la metáfora de Brian Weiss del Diamante:
"Es como si dentro de cada persona se pudiera encontrar un gran diamante. Imaginemos un diamante de un palmo de longitud. Ese diamante tiene mil facetas, pero todas están cubiertas de polvo y brea. La misión de cada uno es limpiar cada una de esas facetas hasta que la superficie esté brillante y pueda reflejar un arco iris de colores.
Ahora bien, algunos han limpiado muchas facetas y relucen con intensidad. Otros sólo han logrado limpiar unas pocas, que no brillan tanto.
El diamante es perfecto, sin un defecto. La única diferencia entre las diferentes personas es el número de facetas que han limpiado. Pero cada diamante es el mismo y cada uno es perfecto.
Piénsalo así: Si un ser humano, un ser de tu misma especie lo ha logrado, tú también puedes lograrlo! En mi opinión, lo único que nos diferencia a unos de los otros es:


Nuestra percepción

Nuestra conciencia del entorno, que viene dado por todo lo que hemos aprendido de nuestros padres, educadores, etc. Esa percepción viene dado por nuestras creencias y  genera unos pensamientos determinados que van a nuestras células creando salud o enfermedad, carencia o abundancia, miedo o amor.
Así que te diría que si tu entorno no te favorece, lo cambies! y si no puedes cambiarlo (de momento), entonces cambia tu PERCEPCIÓN del mismo.

Nuestros hábitos

Según lo que hayamos aprendido a lo largo de toda nuestra vida tendremos hábitos muy saludables y favorables para nuestra felicidad, o bien hábitos perniciosos para nuestro bienestar.
Si identificas un hábito que no te favorece en tu vida, es el momento de cambiarlo! puedes eliminarlo con intención, propósito y constancia, y poner en su lugar hábitos que respeten y dignifiquen tu esencia impecable. Lo que ya eres. Realmente tú eres el único que puedes.

Nuestras capacidades o talentos desarrolladas y por desarrollar

Yo borraría la expresión, "No sé" de nuestro vocabulario, y la cambiaría por un "No lo he aprendido aún" o un "No sé aún cómo".

Una incapacita, la otra abre una puerta al aprendizaje, al conocimiento, a la constancia y al tesón. Al propósito de conseguir llegar a donde nos gustaría llegar.

¿Qué talentos crees que necesitas?

Te aseguro que ya los tienes!!

Se trata de pulir nuestras facetas escondidas, o con polvo por haber sido ignoradas, y hacer que brillen y se expandan en múltiples colores. ¿Estás dispuesto? Porque, recuerda: Eres un diamante, y eres perfecto.






No hay comentarios:

Publicar un comentario